Gisele Bündchen encabeza la campaña Otoño/Invierno 2025 de Elisabetta
Franchi
Alguna vez el rostro de cada pasarela y campaña, el ícono
brasileño regresa como la visión de la marca de confianza eterna y feminidad
moderna.
Para Gisele Bündchen, reaparecer en una campaña de moda es
recordarle a la industria quién marcó la pauta. Después de que las supermodelos
de los 90 convirtieran la moda en un espectáculo global, Gisele llegó con el
cambio de milenio y transformó la era con su propio poder, desfilando en casi
todas las pasarelas y campañas, y redefiniendo lo que significaba ser una
supermodelo moderna.
Hoy, esa fuerza imperecedera regresa en la campaña
Otoño/Invierno 2025 de Elisabetta Franchi, fotografiada por Luigi & Iango
en Miami. «La verdadera belleza es una fuerza salvaje que nace del amor y la
valentía», dice Franchi sobre la colección. Ese sentimiento irradia en la
presencia de Gisele. Ella encarna el mensaje atemporal de la marca: una mujer
que reconoce y se apropia de su luz, convirtiéndose en una fuerza de
inspiración imparable.
Franchi ha construido su marca desde hace tiempo sobre una
visión de feminidad segura, libre y sin complejos. Elegir a Gisele es una
extensión natural de eso, dado que no solo es la belleza personificada, sino un
ícono nacional, y la mujer que desfiló por la que quizás fue la pasarela más larga
de la historia en los Juegos Olímpicos de Río 2016 (una zancada que se
convirtió en un momento cultural en sí misma).
Para Elisabetta, quien fundó la casa que lleva su nombre en
Bolonia a finales de los 90, esta es una declaración de identidad. Sus prendas
están dirigidas a la mujer audaz y refinada que se niega a encogerse, y quién
mejor para plasmar esa idea que la supermodelo brasileña.
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