El estilo
ibicenco, un clásico que siempre es tendencia
Vestidos vaporosos
blancos, crochet, pedrería colorida, flecos y botas "cowboy"
conforman algunas pinceladas del estilo ibicenco, una tendencia en sí misma que
cada verano se adueña de conjuntos de dentro y fuera de la isla blanca en un
estilo marcado que se resiste a pasar de moda.
Las tendencias cambian
y evolucionan, pero algunas se aferran con fuerza y se resisten a abandonar la
moda. Es el caso del estilo ibicenco que, cada verano, sale a la luz para
inspirar distintos estilismos que trascienden las fronteras de la isla balear e
impregnan todo tipo de “looks”.
La entrada en los años
setenta supuso para Ibiza la llegada de los primeros hippies, provenientes de
diferentes países. Además de una filosofía bohemia que en la actualidad aún se
asocia a la isla, trajeron prendas, colores y tejidos de distintas partes del
mundo, que en conjunto a la vestimenta tradicional isleña dieron como resultado
un aire ecléctico que hoy sigue siendo su sello.
Ecléctico, bohemio y
de poso muchas veces artesanal, Ibiza tiene un estilo propio que lejos de
quedarse en la isla cala en estilismos fuera de sus fronteras cada época
estival. Básicos como camisas de lino, vestidos de flecos y otros vaporosos de
volantes blancos contrastan con botas de serraje en antelina y pedrería
colorida para conformar una identidad.
“En Ibiza la gente
viene a liberarse, a descubrir, y la moda va de la mano con todo esto, va
ligada a momentos de disfrute”, declara la diseñadora Virginia Vald, cuyas
creaciones lucieron en la última pasarela Adlib de moda ibicenca supermodelos
de los años noventa como Nieves Álvarez, Martina Klein o Verónica Blume.
Sus vestidos de novia
y también prêt-à-porter (listos para llevar) se han convertido durante estos
años en un emblema de moda de la isla, con creaciones entre las que predomina
el blanco y los encajes, con flecos, pedrería y conjuntos en dos piezas que las
modelos lucen con botas o complementos como sombreros de vaquero.
Vestidos muy
vaporosos, puntillas, guipures de entramados exclusivos y tejidos nobles como
el "voile" (algodón 100 % orgánico) son algunas de las señas de
identidad de Charo Ruiz Ibiza, una de las primeras diseñadoras de la isla en
consagrar vestidos que rinden culto a esta particular estética, esa que, en
palabras de Alberto Amador, su director de moda, “imprime mucho carácter”.
Para el director, la
esencia de esta vestimenta no solo reside en motivos estéticos, sino también en
la usabilidad. “Son prendas que ante todo tienen que ser cómodas para el verano
y sus altas temperaturas, siendo fáciles de movimiento, transpirables y muy
favorecedoras”, señala.
Tras varios años en la
marca, la ecuación con la que define la moda isleña es sencilla: “Sentirse bien
no pasa de moda, y muchas de estas prendas son como una camiseta básica, pero
en versión bonita”, un hecho al que acompaña la gama cromática, generalmente en
torno a colores neutros".
Encajes blancos,
volantes y procesos de manufacturación artesanales son los que definen la
apuesta de Tony Bonet Ibiza, para quien la clave de este estilo reposa
precisamente en este saber hacer, que rescata el concepto de “slow fashion”
(moda lenta) tan en boga durante las últimas temporadas.
“El secreto de esta
moda es que es un movimiento muy artesanal, en el que prima la comodidad que
viene dada con el uso de buenos tejidos”, dice el diseñador, para quien este
factor funciona como base de una estética marcada que “ha sabido cómo
evolucionar con los años y las tendencias sin perder sus orígenes”.
Bonet recalca que son
muchos los diseñadores que componen el entramado de la moda ibicenca. “Somos
muchos creadores, pero hacemos una moda fresca y con movimiento que nos
identifica”.
“Más que diseñador, me
considero artesano de la moda”, explica el creador, apuntando hacia el factor
de durabilidad. “Mi madre sigue llevando vestidos de hace 20 años que están en
perfecto estado”, apunta.
Artesanía, mezcla
ecléctica y un aire bohemio que la propia isla transmite conforman un estilo
propio que resurge con fuerza cada verano y coloca a la isla balear como un
referente de moda estival que no entiende de temporadas o tendencias.
Foto-periodista:GONZALO ESGUERRA P.
No hay comentarios:
Publicar un comentario