Paris Fashion Week: Christian
Dior en todos los tonos de azul
“Mi generación siempre prefirió el negro, pero Monsieur Dior
amaba el color azul. Decía que ambos tenían las mismas cualidades”, dijo Chiuri
sonriendo tras bambalinas de su segundo desfile de prêt-à-porter para Christian
Dior.
La colección, sin duda, está dirigida a una mujer joven y
dinámica, con un pequeño toque de rebeldía que ha dado un nuevo aire a la
imagen de Dior.
El desfile inició con una serie de tonos de azul, pasando
del azul marino a los tonos más oscuros, sobre gabardinas en tafetán con seda
plegada debajo de la cintura. El deporte se fusionó con la sastrería con las
chaquetas tipo poncho y con las camisas atléticas de seda usadas sobre
pantalones vaqueros de corte bajo. Sus vestidos de noche y cóctel
semi-escarpados, bordados con una explosión de cometas, estrellas y lirios,
lucían espectaculares.
Chiuri también presentó algunos accesorios fabulosos: de las
botas altas de ante a las botas natty tobilleras con imitación de clips de
esquí. De igual forma, su elección de bolsos cruzados sobre el hombro, usando
el patrón de la firma, harán que las filas de las cajas registradoras de la
tienda de la avenida Montaigne sean largas durante toda la temporada.
Chiuri mezcló muchas referencias masculinas, especialmente
un trío de pantalones y chaquetas de trabajo, hechos en bleu du travail,
estampado con manos y estrellas negras. Todos estos elementos están a un millón
de kilómetros de la estética del gran Monsieur Dior.
"Creo que tenemos que vivir en nuestros tiempos. Así
que tenemos que hablar de igualdad y considerar el movimiento sin género.
Incluir uniformes militares, deportivos o de trabajo con nuestras colecciones,
otra razón para tanto azul. Los uniformes azules son, por supuesto, un signo de
género. Porque el rosa siempre será para las damas", dijo riendo la
diseñadora italiana.
Habiendo dicho esto, el desfile no fue un éxito total. Es
difícil de comprender la razón por la que Dior invitó a la crema y nata al hermoso
jardín del Museo Rodin para luego conducir a los invitados a una oscura tienda
a modo de discoteca. Por otra parte, el
casting dejó algo que desear: demasiadas chicas pálidas con boinas oscuras.
Sin embargo, después de 28 años de asistir a desfiles de
Christian Dior, solo cabe decir que nunca se había visto tanta moda comercial y
accesorios en un desfile de esta casa. Como dicen los franceses, seguro se
venderán comme des petits pains o, mejor dicho, como pan caliente.
Foto-periodista:GONZALO ESGUERRA P.
corresponsal colombia
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