Moschino
resucita el espíritu arty y rebelde de los años 80 en Milán
El regreso de Moschino
al calendario masculino en Milán no pasó desapercibido el domingo. Como de
costumbre, Jeremy Scott organizó un desfile tónico y colorido, recurriendo a
las imágenes e ilustraciones de moda que han forjado su cultura de la moda.
Todos los ingredientes
estaban presentes: colores vivos, arte, trampantojos, estilo latino-hispano,
registro militar... Sin olvidar la transgresión en un espíritu con un ligero
toque de S&M. Son elementos que el director artístico de la marca estrella
del grupo italiano Aeffe ha venido planteando en sus colecciones masculinas en
los últimos años, y que se reúnen esta temporada en una única colección.
¿El hilo conductor? El
famoso ilustrador y fotógrafo de moda de los años 80, Tony Viramontes. Con sus
imágenes, especialmente en la revista The Face, que Jeremy Scott devoraba en su
adolescencia, el estadounidense de origen mexicano, que falleció de sida a los
31 años en 1988, creó un mundo imaginario que ha inspirado a muchos
diseñadores, así como a numerosos artistas japoneses. El diseñador de Moschino
pudo recurrir a sus archivos para reproducir varios de sus dibujos en la ropa.
Trazos abstractos de pintura, rostros esbozados, patrones y grafitis pueden
verse en tecnicolor en chaquetas, trajes, camisetas, sudaderas y cazadoras.
En su entusiasmo,
Jeremy Scott llenó secciones enteras de gabardinas, camisas y pantalones negros
con grandes pinceladas rosas, sin olvidar los accesorios. Sombreros, bolsos,
botas... ¡Todo vale! Algunos trajes reproducen las sombras y los pliegues de la
tela en trampantojo. Otros parecen haber sido garabateados rápidamente con
Stabilo, con trazos fluorescentes tanto en blazers chic como en trajes de
motorista. Varios trajes negros muestran cuadros realizados con tiza blanca por
una mano febril.
Para la silueta,
Jeremy Scott se ha inspirado en el movimiento Buffalo, también nacido en los
80, que fue promovido en las páginas de The Face por el fotógrafo Jamie Morgan
y el estilista de moda Ray Petri. Este estilo, revolucionario para su época,
promovía una nueva actitud antisistema, sexy, fuerte y provocativa, en la que
los hombres llevaban faldas o se pavoneaban en boxers y Dr. Martens.
Este es el espíritu
que impregna la nueva colección de Moschino, en la que los modelos llevan botas
de muescas o botas altas de cuero negro, sombreros sevillanos o boinas
militares, adornando a veces su look con grandes cinturones de cuero o largos
guantes negros de vinilo glamurosos.
Las faldas plisadas se
superponen a veces a los pantalones. Por otro lado, los abrigos parecen
descomponerse, como en un perfecto de cuero combinado con una falda envolvente
del mismo material, o una chaqueta impermeable llevada con una falda de
longitud media cortada del mismo tejido camel para formar una gabardina.
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